lunes, 19 de diciembre de 2016

El Tapete Floral más Grande del Mundo



Por César Romero Vargas
En días pasados, la empresa Jardines de México con sede en el municipio de Jojutla en el estado de Morelos, México, creó un tapete floral compuesto por 127,000 flores de Noche Buena, de 13 tipos diferentes. Estas plantas que se encontraban en perfecto estado abarcaron una extensión de terreno de 14,200 metros cuadrados, lo que lo convirtió en el conjunto de flores más grande del mundo.  Para verificar la autenticidad de este registro, Carlos Tapia Rojas, adjudicador de la Guinness World Record Ltd, que es la empresa que se ha convertido en la principal autoridad internacional en la verificación de los récords mundiales, se trasladó a hacer la medición de este tapete de flores, para confirmar que se había superado el record anterior que se había realizado el pasado 26 de agosto del 2016 en la ciudad de Kiev, en Ucrania en donde se realizó un tapete de 13.057 metros2 , cantidad que se vio superada por los 14,200 de Jardines de México, para así  imponer un nuevo record del mundo.  Una vez terminada la comprobación, Tapia Rojas entregó a los propietarios de estos jardines, que son considerados como los más grandes del mundo, el diploma que acredita este nuevo record mundial.

El libro Guinness de los récords, es una obra de referencia publicada anualmente que contiene una muy amplia colección de récords mundiales, tanto en los logros humanos como del mundo natural y material.  El propio libro tiene el récord por tratarse de la serie de libros más vendida con derechos de autor en todos los tiempos, también es uno de los libros más robados de las bibliotecas públicas en los Estados Unidos. La popularidad de la franquicia ha convertido a los Guinness World Récords en el órgano rector de los record mundiales y la franquicia se ha expandido más allá de la impresión, pues existe una serie de televisión y un museo.
Dentro de la empresa del Guinness World Records, el equipo de Administración de  se encarga del control de la exactitud, y el equipo de Administradores de Récords mantiene la veracidad de los mismos. Ambos filtros son necesarios para que un récord se acepte. El libro es un récord en sí mismo, ya que tiene ventas superiores a los 100 millones de ejemplares en 100 países y se publica en 37 idiomas distintos.  Además el Guinness World Records™ es el libro más vendido de todos los tiempos, si no se consideran las obras exentas de derechos de reproducción, como la Biblia.

El lector seguramente se preguntará, pero como se empezó a llevar un registro de los récords mundiales y la respuesta es que todo, se inició en una partida de caza que se realizó en 1951 en Irlanda, en esa actividad estaba, Sir Hugh Beaver que  por entonces era el director ejecutivo de la Guinness Brewery y durante la cacería, debatía con sus compañeros si el pájaro de caza más rápido de Europa era el chorlito dorado o el urogallo
Posteriormente  se le ocurrió la idea de que si hubiera un libro que proporcionará la respuesta a este tipo de preguntas podría llegar a ser muy popular, por lo que decidió encargarles a Norris y Ross McWhirter, que llevaban un tiempo a cargo de una compañía de investigación en Londres, que compilaran lo que se convirtió en el Libro Guinness de los Récords. La primera edición se publicó el 27 de agosto de 1955, y en esa Navidad fue el número uno en la lista de los libros más vendidos en el Reino Unido. Desde entonces, Guinness World Records se ha convertido en una marca ampliamente conocida en el ámbito de los récords mundiales.
Gracias a este libro, Beaver pudo saber que era el Urogallo es el pájaro de caza más veloz de Europa ya que esta ave ha llegado a superar los 70 Km/h, mientras que el Chorlito Dorado sólo ha alcanzado los 65 Km/h












lunes, 12 de diciembre de 2016

El Chapitel del Calvario de Cuernavaca



Por César Romero Vargas

El Chapitel del Calvario es una bella construcción que se encuentra ubicada en la avenida Morelos, justo enfrente del templo de San José y fue construida en 1538, según explica una inscripción esculpida en la fachada de la ermita y que fue consagrada a la Virgen de Guadalupe en mayo de 1772, por el presbítero Lorenzo Messia y Lovo, cura de Cuernavaca. Este sitio ocupa un área rectangular que está limitada por esbeltos arcos y cubierta con una cúpula. Sobre esta se levanta un pedestal que sostiene una esfera rematada con una cruz.
En el códice Municipal de Cuernavaca que se encuentra en la biblioteca nacional de Paris, Francia, se menciona que a mediados del siglo XVI, ya existía en el mismo punto en donde hoy se encuentra el chapitel, un humilladero en donde hacían posada los peregrinos que iban al Santuario de Chalma, en ese entonces había una cruz y es por eso que se le conocía con el nombre del calvario. Hay que mencionar que esta peculiar construcción corresponde a un tipo de capillas abiertas que se edificaron usualmente en los siglos XVI y XVII para cubrir imágenes, pero especialmente cruces y que se les denominaba como "chapiteles", por sus cubiertas piramidales.
La altura desde el piso hasta la cruz es de catorce metros y su anchura es de aproximadamente siete metros, los arcos tienen seis metros de alto por tres de ancho, en el lado oriental y occidental del monumento. Según información de Valentín López González hubo antes unos escudos españoles labrados en piedra que fueron borrados para cumplir la ley que se promulgo a raíz de la independencia y que dictaba que se quitara de los edificios y monumentos todo signo o blasón que recordaran el dominio español, sin embargo se puede observar en el ángulo noroeste del chapitel un escudo español idéntico al de las monedas antiguas con su contorno bien delineado y sus cuatro cuarteles, dos que tienen un león y dos un castillo
En el interior hay un pedestal que sostiene una estatua de la Virgen de Guadalupe que se encuentra sobre una base octagonal que se encuentra limitada por cuatro caras, esta bella imagen cincelada con finura por un artista desconocido, fue derribada de su pedestal la madrugada del 19 de diciembre de 1934 por el ejercito de camisas rojas que eran dirigidos por el entonces gobernador de Tabasco, Tomas Garrido Canabal.

La imagen desapareció y no fue hasta el 22 de octubre de 1948 cuando el presbítero zacatecano Moisés Ugalde, la encontró en los subterráneos de la Catedral Metropolitana y a instancia de Chucha Ocampo regresó a Cuernavaca, siendo colocada nuevamente en su lugar el 19 de diciembre, hay que mencionar que mientras la imagen estuvo desaparecida la substituyó una obra del escultor Adolfo Ponzanelli, la cual actualmente se encuentra en el interior de la iglesia de San José  

miércoles, 7 de diciembre de 2016

Conjunto de la Catedral de Cuernavaca



La Catedral de Cuernavaca, “Ex convento de la Asunción”  se encuentra ubicada en la avenida Morelos esquina con calle Hidalgo, colonia Centro, fue una de los primeros establecidos en la Nueva España y tuvo una gran importancia en el proceso de evangelización de la región, así mismo fue un importante paso estratégico a las Filipinas y al Medio Oriente, en este inmueble habitaron notables religiosos como Hernaldo de Leyva y Motolinia.
En el año de 1525, arribaron a las costas de México varios grupos de misioneros, siendo los primeros doce frailes franciscanos quienes se establecieron en el Valle de Morelos y procedieron a edificar una capilla abierta con la finalidad de colaborar con la fe cristiana de los indígenas a la cual llamaron Nuestra Señora de la Asunción; en 1529 se ratificó la fundación formal del monasterio y construyeron la quinta fundación franciscana en México que se edificó en unos terrenos donados por Juana de Zúñiga de Cortés, posteriormente   El 30 de octubre de 1891 se realizó una misa de tres ministros en la referida capilla en la cual se hizo la solemne declaración que erigía en diócesis episcopal el territorio de Morelos, y en Catedral a la misma.
En 1957 el Departamento de Monumentos Coloniales efectuó una restauración, durante estos trabajos se retiró la capa de cal que cubrían las paredes y se descubrieron restos de pintura de un mural del siglo XVIII el cual representaba la llegada a Japón y el martirio del Santo mexicano Felipe de Jesús y sus compañeros en la ciudad japonesa se Nagasaki. otros frescos de gran calidad que se albergan en el inmueble muestran al Papa Inocencio II bendiciendo a los misioneros,
Su arquitectura es notable destacando  su bella torre que está ubicada esta al  norte de la entrada principal y consta de tres cuerpos, los dos primeros fueron edificados en el siglo XVIII, su ultimo cuerpo es más sencillo y desentona con el conjunto pues el original se cayó en un temblor del año de 1882 y se reconstruyó el mismo año.
Al oriente de la construcción se cuenta con una biblioteca y corredores, en la parte posterior existe un patio, donde se localiza una librería la cual cuenta con doce árboles y uno grande al centro del patio con una estrella que simbolizan los doce apóstoles y a Cristo con su estrella de Nazareth

El conjunto se complementa con la Capilla de la Santa Cruz, de estilo neogótico, donde se rinde honor a la virgen del Carmen, la Capilla de la Tercera Orden que es una de las joyas coloniales de Morelos, al presentar uno de los retablos más bellos del país, también  nos encontramos la Capilla Abierta de San José que fue la primera en ser construida   por que a los indígenas estaban acostumbrados a acudir a ceremonias religiosas al aire libre y finalmente tenemos la Capilla de Nuestra Señora de los Dolores. 

Monumentos a los Mártires de Chiconcuac y al Obispo Plancarte de Cuernavaca.




En el atrio de la Catedral de Cuernavaca que funcionó como cementerio de la ciudad  en la época virreinal se encuentran en un pequeño jardín ubicado al costado este de la entrada principal, dos importantes monumentos necrológicos, uno de ellos es el de los “Mártires de Chiconcuac”  construido en honor a Nicolás y Juan Bermejillo, Ignacio Tejera, Víctor Allende y León Aguirre quienes fueron brutalmente asesinados en la hacienda de San Vicente Zacualpan el 17 de diciembre de 1857 por una banda de bandoleros formada por Nicolás Leyte y Trinidad Carillo, entre otros. Los Bermejillo eran miembros de una muy importante familia de españoles que eran propietarios de haciendas como la Chiconcuac, Dolores y San Vicente en el estado de Morelos por lo que por que su muerte fue un grave suceso en el país
Aunque existen otras versiones que afirman que el atentado que les costó la vida a los Bermejillo fue resultado de que excursión de tropas de don Francisco Leyva que llegaron a la hacienda buscando víveres y fueron rechazados y agredidos por los ocupantes de la hacienda por lo que los soldados contestaron la agresión, la más aceptada es que Don Nicolás tuvo problemas con un campesino llamado Trinidad Carrillo por cuestiones de ganado por lo que este se unió con un grupo de malechores para asaltar la hacienda y el día 18 de diciembre de 1856, mataron  en San Vicente a Don Nicolás y a Juan Bermejillo, junto con Don León Aguirre, Ignacio Tejera y Víctor Allende.
Este grave incidente tuvo importantes y serias repercusiones internacionales y ocasiono protestas diplomáticas por parte de España por lo que el gobierno  de México actuó de inmediato y  capturo a los culpables del ataque y se le sentencio a la pena capital que consistió en la muerte por garrote la cual se efectuó el 25 de enero de 1859 muy  cerca de la estatua encuestre de Carlos IV en la Ciudad de México.
Ese día se les aplico la sentencia a los responsables, entre ellos a Nicolas Leyte, Miguel Herrera, Trinidad Carrillo, Inés López y Camilo Cruz, mientras que a  Marcelo Bernal lo sentenciaron a diez años de prisión y a María Sabina Coria le dieron un año de prisión en la cárcel de mujeres de Cuernavaca
En 1876 Pio Bermejillo construyó el monumento que cuenta con un remate intencionalmente  truncado y donde se puede leer los nombres de Nicolás y Juan Bermejillo, Ignacio Tejera, Víctor Allende y León Aguirre y la fecha de diciembre 18 de 1856 RIP.  En la placa ubicada en el lado los opuesto dice “Se construyo este monumento a expensas de Don Pio Bermejillo para perpetuar la memoria de de las victimas inmoladas en la hacienda de San Vicente, cuyos restos descansan aquí, Año de 1876”


A un costado de este monumento se encuentra la estatua del segundo obispo Cuernavaca Señor Francisco Placarte y Navarrete que fue realizada por el escultor Fidias Elizondo y se construyó como parte del homenaje hecho por la sociedad de ex alumnas fundadoras del colegio Santa Inés  al señor obispo por el centenario  de la fundación de este colegio que se celebró en 1950, este monumento estuvo en un inicio frente a la Capilla Abierta de San José hasta que se cambio a su actual posición ubicada al este de la entrada principal del catedral.